ADOPTÉ UNA MAMÁ

 

Cuando tenía nueve años adopté a una mamá. Sí, así, sin más, la adopté. Punto. Mamás en situación de adopción Una porque no va poniendo atención, entre la inflación y el dolor de cintura que se irradia hasta el muslo cuando hay humedad es entendible, pero te puedo asegurar que hay mamás en situación de adopción por todos lados. Es cuestión de estar atenta, evitar las distracciones tecnológicas y mirar un poco alrededor. Quizás en los tardíos 80's era más fácil o yo estaba en la búsqueda. ENE le esquivaba a la cocina Se llamaba N, era rubia, de estatura mediana y no le gustaba cocinar (con el diario del lunes quizás le gustaba cocinar pero no tenía tiempo entre hiperinflación, su otra hija y los pacientes) Con N conocí el puré chef, las salchichas rellenas con queso y los fideítos de colores de sopa como guarnición. A N no se le daba bien cocinar pero para mi cumple SIEMPRE preparaba la torta 20 y 20. Te dejo la receta al final de esta carta. Dice N que: "Es una pavada" El Falcón N trabajaba todo el día. Había estudiado mucho y trabajaba de eso. Era una PROFESIONAL. Se vestía lindo y manejaba un Falcón enorme. Cuando me llevaba a Buenos Aires (N le dice Buenos Aires a CABA) yo viajaba acostada atrás, sin cinturón, claro, eran los 80´s miraba por la ventanilla e inventaba mis primeras historias. Años después cambió el Falcón por un Fiat 147 de 2 puertas. Yo creo que no fue un buen cambio porque el 147 atrás era mínimo y teníamos que pedir ayuda para salir pero para N fue un salto de calidad y practicidad. Alondra N se despertaba muy temprano porque tenia muchas actividades. Iba y venía todo el día. Era agotador verla desde el sillón mientras nosotras hacíamos maratón de Friends. ¿Nosotras? Claro, como estrategia de adopción me hice amiga de su hija inmediatamente y a su hija la adopté como hermana.  Sí, las hermanas también se pueden adoptar. Y sí, a los 9 años tenía todo calculado. Una más de la familia N me llevaba de vacaciones a Gessell en enero con su familia, a alquilar pelis al video club los sábados a la noche y a comer los domingos al mediodía a la parrilla de la esquina. En la parrilla N me dejaba repetir la Coca Cola incluso sabiendo que no la iba a terminar. Canceló el consultorio N está en todos los momentos importantes de mi vida: conoció todas mi casas en plena mudanza y no solo no se espantó sino que le vió el lado positivo hasta al monoambiente sin ventana del 2007. Suspendió el consultorio el día que me recibí para ir a Ciudad Universitaria a tirarme huevos y le sacó el dolor de panza a mi hija a las pocas horas de haber nacido (Sí, entró de forma clandestina fuera del horario de visita de maternidad) Situación actual En la actualidad N cree que me cuesta levantarme por las mañanas como cuando era adolescente Si no atiendo el teléfono a las 11 me pregunta: ¿te desperté? No N, estoy despierta desde las 6.15 ah bueno y sigue: Te acordás lo que me costaba despertarte para ir el colegio!! Y se ríe. N siempre se ríe cuando me recuerda de adolescente. El otro día, después de 35 años de haberla adoptado, N me envió un mensaje de voz de 3:37 minutos. Promediando los 3 minutos de mensaje me dijo: Pitri, sos como una hija para mi. Agente secreta N me dice Pitri. Es la única que me llama así hace 35 años. Como  Pitri suena medio ruso creo que es mi nombre secreto de adoptadora de mamás y también, probablemente, sea  mi nombre en clave de hija elegida por N a los 9 años.