LOS PUNTOS SOBRE LAS ÍES
Esta semana celebramos, en el único grupo de WhatsApp al que pertenezco (eso ya es una celebración en sí misma), que una de sus integrantes pudo poner límites en su trabajo
En el grupo somos 4. Todas mujeres.
Yo respondí con el meme de Di Caprio brindando con una copa de champagne.
Otra con fuegos artificiales y manifestó sentirse inspirada para algún día hacer lo mismo.
La que puso los puntos sobre las íes minimizó un poco su accionar: “tampoco les dije tanto, vamos a ver qué pasa” La cuarta no hizo declaraciones.
La cuarta integrante es JEDI MASTER en límites.
Es mi musa inspiradora para la bolsa TOUT À LA MERDE: te manda a la Merde a lo GRANDE.
Se lo adjudicamos al alto porcentaje de tanada en su sangre. Incomprobable hasta el momento. La querés como amiga nunca del otro bando.
Qué celebramos?
Poner límites?
Decir que NO?
PONER LOS PUNTOS SOBRE LAS ÍES?
La excepción. Celebramos la excepción.
Porque LA regla es hacer ese favorcito.
Es correr porque lo del otro siempre es más urgente que lo propio.
Es tapar los agujeros del que no hace su laburo y me atrasa (Y no le importa)
“Total a vos no te cuesta nada”
Me cuesta tanto. Me cuesta vida, sabés?
De repente estoy viviendo vidas ajenas, apagando incendios extranjeros y creyendo que deseo hacer aquello que ni siquiera se me pasó por la cabeza.
El NO tiene un precio.
Todo tiene un precio en un sistema donde se celebra la homogeneidad y el encajar en unos moldes que nunca pedimos. El no levantar la voz. El no quejarse. El ser obediente.
Si el precio es no encajar
Ser la rara
Que me digan Mal llevada (en el mejor de los casos)
Que no me quieran en el peor de los casos
Qué no me quiera quién? Alguien que desea manejarme la vida porque no sabe qué hacer con la suya?
Qué no me quiera Ese? Esa?
Qué miedo, no?
Cuando dicen que la libertad no tienen precio me río o lloro depende de la luna de esa semana.
La libertad es carísima pero se que vale cada centavo
Yo respondí con el meme de Di Caprio brindando con una copa de champagne.
Otra con fuegos artificiales y manifestó sentirse inspirada para algún día hacer lo mismo.
La que puso los puntos sobre las íes minimizó un poco su accionar: “tampoco les dije tanto, vamos a ver qué pasa” La cuarta no hizo declaraciones.
La cuarta integrante es JEDI MASTER en límites.
Es mi musa inspiradora para la bolsa TOUT À LA MERDE: te manda a la Merde a lo GRANDE.
Se lo adjudicamos al alto porcentaje de tanada en su sangre. Incomprobable hasta el momento. La querés como amiga nunca del otro bando.
Qué celebramos?
Poner límites?
Decir que NO?
PONER LOS PUNTOS SOBRE LAS ÍES?
La excepción. Celebramos la excepción.
Porque LA regla es hacer ese favorcito.
Es correr porque lo del otro siempre es más urgente que lo propio.
Es tapar los agujeros del que no hace su laburo y me atrasa (Y no le importa)
“Total a vos no te cuesta nada”
Me cuesta tanto. Me cuesta vida, sabés?
De repente estoy viviendo vidas ajenas, apagando incendios extranjeros y creyendo que deseo hacer aquello que ni siquiera se me pasó por la cabeza.
El NO tiene un precio.
Todo tiene un precio en un sistema donde se celebra la homogeneidad y el encajar en unos moldes que nunca pedimos. El no levantar la voz. El no quejarse. El ser obediente.
Si el precio es no encajar
Ser la rara
Que me digan Mal llevada (en el mejor de los casos)
Que no me quieran en el peor de los casos
Qué no me quiera quién? Alguien que desea manejarme la vida porque no sabe qué hacer con la suya?
Qué no me quiera Ese? Esa?
Qué miedo, no?
Cuando dicen que la libertad no tienen precio me río o lloro depende de la luna de esa semana.
La libertad es carísima pero se que vale cada centavo
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